Por Samuel González Castrillo | @sagocast
Muchos especialistas abordan el tema del autismo con mucha sensibilidad, mientras otros ven una oportunidad para enriquecerse monetariamente y nunca intelectual o profesionalmente.
En Otilca no tratamos el autismo; vivimos con él día a día. Realizamos ejercicios para descifrar los puntos de vista de la realidad y cada enfoque de quienes acuden a nosotros, con el mismo interés que mostramos hacia nuestro primer caso.
Muchas personas preguntan por qué Otilca logra resultados tan rápidos, la respuesta es sencilla, porque no recibimos problemas, recibimos aliados para afrontar una condición, y además sabemos cómo se trata o convive con el autismo porque poseemos en esencia tal condición.
Hagamos un ejercicio y reflexionemos sobre el hecho de que todos tenemos una condición y una solución para vivir en armonía y alcanzar el éxito deseado. Entonces, podemos comprender que existe una canalización a lo que se considera problema. En el caso de una persona con autismo, el problema no es la condición en sí, sino la sobreestimulación. Por lo tanto, es importante respetar las necesidades de cada individuo para adaptarse a los estándares del desarrollo humano.
Quiero decirles a mis colegas que evitemos hacer diagnósticos, etiquetas y sugerencias antes de preguntarnos cuál será nuestro aporte a las vidas relacionadas con el caso. A los padres y familiares les pido que no se dejen influenciar por opiniones externas y recuerden que nadie conoce mejor su caso que ustedes mismos.
Eviten distraerse de su realidad, analícenla y búsquenle la pronta canalización a su situación de inconformidad, no olviden que son los mejores aliados de sus hijos, ellos confían en ustedes, nadie los va a comprender, querer y tolerar más que su familia. Recuerden que es Autismo, simplemente autismo.
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