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La Escuela de Música Luisa Cáceres de Arismendi, tiene en marcha el programa educativo Kinder Musical Otilca. Éste tiene como objetivo contribuir con el desarrollo integral de niños y niñas, entre los dos (02) y seis (06) años de edad.

El programa representa un espacio para el ejercicio sensorial, donde, a través de la música, se estimulan las inteligencias múltiples: se trabaja la lateralidad, la motricidad fina y gruesa; convirtiendo la música en una herramienta fundamental para fortalecer el desarrollo intelectual, motor y social. Se estimula, además, la imaginación y la creatividad de los infantes participantes.

Éste servicio integral funciona en los siguientes horarios: martes y viernes de 4:30 p. m. a 6:00 p. m.; se trabaja con matrícula abierta y actualmente ofrecen inscripciones con cupos limitados.

En sus primeros años, los niños son receptores absolutos de todo tipo de sensaciones. Al sentir la música de una forma tan intensa, ésta estimula su inteligencia, mejora la capacidad de memoria de atención y de concentración; la habilidad para resolver problemas matemáticos y de razonamiento complejos.

«Con la música, la expresión corporal del niño se  potencializa», explica Samuel González Castrillo, director de Otilca, músico, licenciado en educación y especialista en desarrollo cultural.

“La ventaja competitiva de nuestros programas, con respecto a las alternativas del mercado, radica en que estos se encuentran llevados a cabo por músicos de reconocida trayectoria, quienes además somos un equipo de especialistas en educación.

La pedagogía utilizada en OTILCA, se encuentra cuidadosamente diseñada y fundamentada en años de estudio y experiencia de todos los profesionales que conforman esta gran familia, para garantizar una educación de la más alta calidad, dirigida a los más pequeños de la casa”, afirmó González.

Las investigaciones que se han referido al efecto de la música sobre el cerebro infantil, coinciden en que ésta provoca una activación de las zonas implicadas en el procesamiento espacio-temporal, los introduce a los sonidos y significados de las palabras, fortalece el aprendizaje y contribuye a mejorar su lenguaje.

Es sumamente notable como las letras de las canciones, además de favorecer su discriminación auditiva, enriquecen el vocabulario del infante, aumentando directamente su capacidad de comunicación e inteligencia.

«En Otilca no se realizan audiciones, hacemos honor a nuestro eslogan: Música sin límites. Todos tienen cabida. Estructuramos nuestros programas para adaptarlos a las necesidades de quienes desean vivir el maravilloso mundo de la música, a través de las preparadas manos de nuestro equipo”, dijo González.

La Escuela de Música Luisa Cáceres de Arismendi, toma todos los beneficios de la música para propiciar que los niños del Kinder Musical Otilca sean más sociables. Se les brinda la oportunidad para que interactúen entre sí y con los adultos, generando un crecimiento cognitivo bidireccional en  condiciones continuamente monitoreadas.

Al trabajarse a la par con el baile, se estimulan los sentidos, el equilibrio, y el desarrollo muscular de los niños. La danza logra que se adapte el movimiento anatómico a los compases, contribuyendo también de esta forma a potenciar el control rítmico de su cuerpo y mejorar su coordinación.

En los participantes se provoca la evocación de recuerdos e imágenes, con lo cual se enriquece el intelecto; además se les ayuda a establecer rutinas, permitiendo sentar las bases sólidas de una disciplina que a la larga generará firmes asociaciones entre la música y la vida misma.

Los padres y representantes que se encuentren interesados para formalizar su inscripción, pueden escribir vía WhatsApp.

Lcda. Yossely Medina

CNP 10795

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